En el año 1958, las hermanas Luisa y Chela Escarria emigraron de Colombia, su país natal, y se instalaron en el centro neurálgico de la noche porteña: la Avenida Corrientes.
Formadas en el oficio fotográfico por sus padres, Luisita y Chela no tardaron en convertir el departamento de calle Corrientes en la sede de Foto Estudio Luisita.